Una dosis de hidratación. Su textura gel se transforma en loción sobre la piel, instantáneamente refresca y restaura su hidratación. El Kikurage u hongo gelatinoso blanco ha sido utilizado en Japón como alimento clave para conseguir una piel luminosa. Se conserva en seco y como una esponja natural al sumergirse en agua, recupera su estado inicial. Para las pieles que necesitan un extra de hidratación. Tras limpiar la piel, exprime (1.5-2ml) sobre un algodón o sobre la palma de la mano y extender por todo el rostro. Puede utilizarse en el cuello. Se recomienda guardarlo boca abajo.